domingo, 30 de diciembre de 2007
respiro, suave. pongo una mano sobre mi pecho y lleno mi torax de aire puro. me desinflo y siento mis palpitaciones. el corazòn està cabalgando. siento que de un momento a otro se va a frenar. pero no llega ese momento. y sonrìo mientras continùo sintiendo mi respiracion. desde el centro. recorro el camino con ella. desde que ingresa hasta que se despide. asi me quedo un largo rato. que placer. tener las piernas para arriba, apoyadas en la ventana abierta. que sol queme mi piel y el viento le haga cosquillas a mis pies. y yo ahi, rodeada de libros que adoro, descansando de mi lectura diaria, tener el celular apagado y el telefono mudo. escuchar el silencio. saber que nada puede interrumpir ese momento. èse es uno de los placeres que suelo darme una vez a la semana.
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2 comentarios:
Nada mejor que darse un respiro de la vida acelarada de estos tiempos.
Saludos!
hola na, como estas? me gusto mucho la descripcion de esa alternativa a tu cotidianeidad... yo tengo un celular, me es util, pero no le doy mucha bola, ahora lo estoy cargando, asi que estoy desconectado de todo y de todos, eso para los tiempos que corren es un error, pero la verdad, en ocasiones se me hace muy molesto el bichito ese, conozco gente que todavia prescinde de ellos y las envidio, yo estuve casi 30 años sin el aparatito, asi que puedo prescindir de el otros 30 mas, pero por ahora lo tengo... saludos, javis
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